Artículo sobre la menopausia Turó Park Clinics
Por:
Dra. Celia Marcos, especialista en Menopausia y Terapia Hormonal
Cathy Morguese, Terapeuta en Nutrición Integrativa.
Objetivo:
- Proporcionar información sobre el periodo de transición a la menopausia que se produce en torno a los 50 años.
- Presentar soluciones en términos de nutrición, hormonas y suplementos para una transición suave.
- Entender qué ha cambiado en los últimos años en el enfoque de esta importante fase de la vida de la mujer.
Cuál es la definición de menopausia?
La menopausia es el momento en que los ovarios dejan de funcionar, cesando principalmente la producción de estrógenos y progesterona, así como un poco de testosterona, lo que provoca cambios en todas las zonas del cuerpo donde hay receptores de estrógenos:
- Área genital: vulva, vagina y uretra, útero y ovarios.
- Huesos: mantenimiento de la densidad ósea, tejido adiposo que influye en la distribución de la grasa, piel que regula la síntesis de colágeno y la elasticidad
- Vascularización: protección contra la aterosclerosis
- Cerebro: regula las funciones cognitivas, el estado de ánimo y la termorregulación, y es neuroprotector.
Generalmente aparece entre los 45 y los 55 años, y la presentación de los síntomas varía mucho de una mujer a otra, al igual que su intensidad.
Se considera que una mujer está en la menopausia cuando han transcurrido 12 meses consecutivos sin menstruación, momento en el que aumenta el riesgo de menopausia.
Perimenopausia: el camino hacia la menopausia
La perimenopausia es el periodo anterior a la menopausia, que puede durar hasta 4 o 5 años, durante el cual todavía hay reglas y pueden alternarse ciclos normales con ciclos modificados, que pueden ser más cortos o más abundantes.
Pueden empezar a aparecer múltiples síntomas, que pueden ser muy inespecíficos y estar causados también por otros factores, como un periodo de exceso de trabajo, un problema familiar, etc., siendo a veces difíciles de detectar y, por tanto, de buscar ayuda.
Pueden incluir problemas de sueño, fatiga, tendencia a la depresión y la ansiedad, irritabilidad y labilidad emocional, dificultad para controlar el estrés, aumento de peso, piel y mucosas secas, pérdida de memoria y dificultad para concentrarse, etc.
Se trata de un periodo que varía enormemente de una mujer a otra y que cada una percibe de forma muy diferente.
El primer reto es, por tanto, detectar si lo que te ocurre se debe a esta fase, porque a veces se trata de síntomas muy inespecíficos como cansancio, estado de ánimo deprimido, falta de concentración y, con la vida que llevamos hoy en día, no tenemos tiempo de pararnos a analizar lo que no ocurre.
Algunas mujeres prácticamente no experimentan síntomas a corto plazo que afecten a su calidad de vida y creen y aceptan que esto es fisiológico y forma parte del envejecimiento, pero otras experimentarán una serie de síntomas, tanto físicos como mentales, que pueden llegar a ser tan intensos que afecten a su vida cotidiana y requieran ayuda.
Síntomas comunes y su progresión
Podemos dividir los síntomas de la menopausia en 3 grupos según el momento en que pueden aparecer. Como hemos comentado, se trata de un periodo extremadamente variable y se presenta de forma muy diferente en cada mujer, por lo que pueden aparecer síntomas a corto plazo, que son bajos durante los primeros meses. o una falta de estrógenos, pueden aparecer algunos, todos o ninguno.
- Se trata de síntomas a corto plazo:Los más conocidos son la aparición de sofocos, que pueden ser muy intensos y despertarte por la noche, dificultad para dormir, aumento de peso y cansancio, y otros menos conocidos como la niebla cerebral: dificultad para concentrarse y falta de memoria, piel seca, caída del cabello, estado de ánimo depresivo, tendencia a la ansiedad, labilidad, palpitaciones. Dolor articular generalizado conocido como síndrome musculoesquelético de la menopausia.
- Los síntomas que aparecerán a medio plazo: En la mayoría de las mujeres después de 4-5 años sin estrógenos se conocerán como síndrome genitourinario de la menopausia, que engloba una serie de síntomas como: disparmeunia, atrofia vulvovaginal, sequedad intensa, dificultad para la lubricación, cambios en la flora vaginal con predisposición a infecciones urinarias y vaginales, perjudicando notablemente las relaciones sexuales.
- A largo plazo: Después de 10 años sin estrógenos, el riesgo de enfermedades cardiovasculares como la hipertensión, la hipercolesterolemia, etc. aumentará significativamente. Actualmente, la principal causa de muerte entre las mujeres es el riesgo cardiovascular: infartos de miocardio, accidentes cerebrovasculares, etc. También aumenta el riesgo de trastornos cognitivos como la demencia, la osteoporosis y las fracturas.
Garantizando el éxito: los 3 pilares
Podemos prepararnos casi ¨preventivamente¨ mediante la nutrición y un estilo de vida saludable, para este periodo de transición. ¿Cómo hacerlo?
Las pacientes que ya tienen una rutina regular de actividad física, sobre todo entrenamiento de fuerza para mantener su masa muscular, que tienen buenos hábitos alimentarios: una dieta sana y variada y buenos hábitos de descanso, ya están a medio camino cuando llega la menopausia.
Los tres pilares son importantes en todas las etapas de la vida, pero en la menopausia son los pilares básicos sin los cuales no podemos seguir llevando una vida sana y disfrutar de todos los aspectos de nuestra vida:
- Buenos hábitos de sueño para un sueño reparador. Intenta acostarte a la misma hora y levantarte a la misma hora, con el objetivo de dormir entre 7 y 8 horas al día. 1 hora antes de acostarse, evitar la exposición a pantallas, música relajante y oscuridad. Al levantarse: luz del día, etc.
- Actividad física regular, incluido el entrenamiento con pesas. 30 minutos 5 días a la semana es el mínimo. Esto es esencial para mantener la masa muscular y activar la tasa metabólica basal, dos factores que se reducen en la menopausia y que es necesario compensar para evitar el aumento de peso.
- Una dieta adaptada, variada y saludable combinada con ayuno intermitente 3 días a la semana tiene múltiples ventajas y ayuda a mantener el peso, activar el metabolismo y favorecer la autofagia.
Cuando se trata de una dieta adecuada, es importante llevar a cabo una evaluación personalizada para determinar qué es y qué no es adecuado para cada individuo. Para reducir al mínimo los posibles efectos secundarios y optimizar la juventud celular.
¿Y el alcohol? Recuerda que el alcohol es uno de los inmunosupresores más potentes, por lo que si una mujer ya padece una enfermedad autoinmune (enfermedad de hashimoto, lupus, artritis reumatoide, etc.), evite el alcohol. Hoy en día existen muchas alternativas sin alcohol, pero tenga cuidado de vigilar su composición, ya que a veces pueden ser muy ricas en azúcares añadidos.
Para conseguir estos tres pilares, necesitas disciplina, perseverancia y motivación.
¿Qué es la terapia hormonal sustitutiva (THS) y cómo sé si es adecuada para mí?
Todos los síntomas se deben a la reducción o ausencia de estrógenos, por lo que el tratamiento más eficaz, en ausencia de contraindicaciones, será la terapia hormonal basada en estrógenos y, especialmente en mujeres que aún conservan el útero, en progesterona.
Los estrógenos pueden administrarse de diversas formas en función del contexto y la historia clínica de cada paciente, y las preferencias pueden ser por vía oral o en forma de crema o solución dérmica.
Antes de administrar cualquier tratamiento, en particular el hormonal, es esencial someterse a un examen ginecológico completo reciente, que incluya:
- una ecografía ginecológica
- citología
- mamografía
- una analítica general que incluya los niveles de vitamina D y hormonas, a fin de evaluar otros factores que puedan influir en el estado de salud de la paciente.
Un mismo tratamiento, dependiendo de la paciente a la que se administre, puede conllevar más o menos riesgos, por lo que es fundamental individualizar cada caso y diseñar un tratamiento personalizado para cada mujer en función de sus antecedentes, patologías de riesgo y antecedentes familiares, y de esta forma reduciremos muchos de los riesgos.
Hormonas con fitoterapia: ¿Qué importancia tienen los complementos alimenticios? ¿Tienen riesgos?
Lo más importante es conocerse a uno mismo para saber qué suplementos necesita. En general, es muy importante asegurar un buen nivel de vitamina D unido a la vitamina K2 para evitar posibles calcificaciones.
- Colágeno
- Mg unido a la vitamina B6 para optimizar la función cerebral y evitar la famosa niebla cerebral.
- Dependiendo de cada caso, podemos optimizar la ingesta de determinadas vitaminas y minerales a través de la dieta.
En fitoterapia, por ejemplo, la maca y la ashwagandha pueden ayudar con los sofocos y la libido, respectivamente. El cardo mariano, por ejemplo, también ayuda al hígado a optimizar la desintoxicación.
¿Existen peligros asociados a la THS? La prensa da la impresión de que hay «antihormonas», a favor y en contra, ¿es para todo el mundo, hay contraindicaciones importantes/historial médico?
Los principales riesgos asociados al tratamiento hormonal durante la menopausia son los siguientes: aumento del riesgo de trombosis: sólo se produce si la paciente tiene más de los factores que la provocan, como obesidad, tabaquismo, enfermedad reumatológica o trombofilia, y si se evita la vía oral, el riesgo se reduce mucho.
Y la otra es el aumento del riesgo de cáncer de mama, un tema muy estudiado y en el congreso de la menopausia de este año, celebrado en Barcelona, concluyeron que si se administran con progesterona micronizada, por debajo de 60a y con un tiempo limitado no aumenta el riesgo, que por otro lado aumenta por falta de deporte, mala alimentación o consumo excesivo de alcohol o tabaco.
¿Cuánto dura la terapia hormonal?
Cada caso debe considerarse individualmente y, en función de la duración de los síntomas y del balance beneficio-riesgo del tratamiento en ese momento, se debe decidir si continuar, con qué tratamiento y si modificar la dosis.
Mientras dure el tratamiento hormonal, es esencial que se someta a una revisión ginecológica completa cada año.
¿Cómo se ve a largo plazo?
Dependiendo de tu estilo de vida, los 3 pilares mencionados y el uso de tratamientos eficaces pueden hacer que la menopausia, en lugar de ser el comienzo de un envejecimiento acelerado y de la aparición de enfermedades crónicas, sea una oportunidad para llevar una vida más sana que antes y seguir disfrutando de todas las facetas de la vida, incluida la sexual.
Después de la menopausia se puede estar mejor que antes, pero hay que prepararse para ello. Lo ideal es que consulte a un especialista en nutrición en torno a los 45 años para hacer balance y determinar quién es usted, sus puntos fuertes y débiles metabólicos. Esto te permitirá planificar con antelación y establecer una dieta adecuada que puede limitar significativamente los posibles efectos secundarios de la menopausia.
¿Y si no quiero tomar hormonas?
Hoy en día, gracias a los avances y a la investigación, existen muchos tratamientos y técnicas no hormonales eficaces, como el láser y la radiofrecuencia, en el nuevo campo de la ginecología regenerativa, que nos permitirán mejorar nuestros tejidos preservando su función de forma muy eficaz y con poco esfuerzo, molestias o contraindicaciones.
También se pueden utilizar plantas que contengan fitoestrógenos para prevenir o limitar los efectos indeseables de la peri y la menopausia, por ejemplo,
- Salvia: Conocida por reducir los sofocos y los sudores nocturnos, también ayuda a equilibrar las hormonas.
- Lúpulo: Rico en fitoestrógenos, puede ayudar a reducir los sofocos y mejorar el sueño y la libido.
- Trébol rojo: Contiene fitoestrógenos que ayudan a reducir los sofocos y mejorar la salud cardiovascular.
- Linaza: Conocida por su contenido en fitoestrógenos, puede reducir los sofocos y mejorar la salud cardiovascular.
- Kudzu: Utilizado en la medicina tradicional china, contiene fitoestrógenos similares a los estrógenos humanos.